La identidad de género ha estado tremendamente presente en el mundo de la música, incluso de forma inconsciente para los oyentes y espectadores. Los músicos en décadas pasadas debían mostrar una imagen que encajase con las expectativas del público, según también su género musical, su propia forma de entender el arte… Ya en los años 60 y 70 podemos encontrar ejemplos de músicos y artistas gays y bisexuales en la industria, aunque su presencia era más o menos limitada. También había muchos que jugaban con esa ambigüedad como forma de provocación, como en el caso del mítico David Bowie y su creación más célebre, Ziggy Stardust. Ya en los 80, con Freddie Mercury convertido en toda una estrella y reivindicando el poder del colectivo LGTB+, las cosas comenzaron a cambiar. El glam de aquella época permitía a los artistas queer mostrarse de una manera mucho más abierta ante un público que empezaba a aceptar esos cambios.
Sin embargo, han tenido que pasar década para encontrar a la primera artista transgénero que ha triunfado en buena parte del mundo con su música. El camino lo marcaron artistas como Dana Internacional, que ganó Eurovisión a finales de los años 90 con su canción Diva siendo la primera cantante trans en conseguir el certamen. Otros músicos y artistas también han comenzado, ya en el siglo XXI, a dar más visibilidad a un colectivo que siempre ha estado marginado y olvidado, cuando no perseguido. En verano de 2022, la canción BZRP Session 51, del productor argentino Bizarrap, llegaba a los tops de varios países latinos con la voz de Villano Antillano. La artista puertorriqueña se convertía así en la primera en colar un gran éxito en las listas de Spotify siendo trans. Su meteórica carrera la ha llevado a colaborar con algunos de los más grandes artistas del género urbano en Latinoamérica, peleando precisamente por despojar a ese género de su sexismo intrínseco. Pero el camino no ha sido precisamente fácil para Villano Antillano, y aquí te vamos a contar toda su historia, donde entenderás también de dónde viene esta artista tan popular.
El peso de ser trans
Villana Santiago Pacheco nació en Bamayón, en la isla de Puerto Rico, en marzo de 1995. Desde temprana edad notó que algo no iba bien en su cuerpo y entendió que era una mujer, aunque su género biológico mostrase otra cosa. A través de la música pudo sostenerse en los momentos más difíciles, puesto que llegó incluso a ser repudiada por parte de su familia al confesar su condición. Villana salió de casa muy pronto y se volcó en la música para sobrellevar una complicada situación vital. Contó con el apoyo de sus hermanas, y también de otros artistas que conoció dentro de la comunidad LGTB, pero aseguró que su condición de trans era como una sentencia de muerte en Puerto Rico. Tanto es así que, ante la falta de oportunidades laborales, tuvo que comenzar a prostituirse, algo que confesó ya siendo una artista reconocida.
Su vida antes del éxito en la música
Tras abandonar su hogar ante la falta de comprensión de parte de su familia, Villana tuvo que cuidar de sí misma en las calles de Puerto Rico. El país no es precisamente uno de los más avanzados del mundo en lo que a respeto por las personas queer se refiere, aunque las cosas están cambiando. En su momento, Villana reconoce que la situación era especialmente complicada, y que su condición la limitaba muchísimo a la hora de encontrar un buen empleo. Tanto es así que finalmente tuvo que optar por una opción desgraciadamente común entre las personas trans: prostituirse. Más aún en Puerto Rico, uno de los países del mundo donde más sexo de pago se consume.
La situación de Villana es similar a la que han tenido que sufrir tantas y tantas personas transgénero no solo en Puerto Rico, sino en muchos lugares del planeta. Por más que las cosas estén avanzando y cambiando a mejor, la situación sigue siendo muy compleja para todo aquel que decide cambiar de género. De hecho, los últimos estudios realizados afirman que una personas trans lo tiene tres veces más difícil incluso que una persona gay para conseguir un buen puesto de trabajo. Sigue habiendo mucho sesgo en contra de esta población, y lo cierto es que, como la propia Villana confesó en su momento, nacer así es como una sentencia de muerte. La música la salvó y le permitió escapar de un mundo que no disfrutaba, llegando a ser una artista reconocida mundialmente.
La sesión con Bizarrap y reconocimiento mundial
Puerto Rico es una isla ubicada en el Mar Caribe, dependiente técnicamente de Estados Unidos, pero con una gran autonomía en lo económico y político. Se trata de una nación muy peculiar ya que es eminentemente latina a nivel social, pero también una gran influencia yankee en su cultura y en sus ciudades. La música es una de las grandes exportaciones culturales de Puerto Rico en las últimas décadas, con artistas como Ricky Martin, Rubén Blades o Calle 13. Más recientemente, gente como Bad Bunny o Arcangel también han puesto a la isla en el mapa de los sonidos más refrescantes. Villano Antillano ha sido uno de los últimos en llegar a este salón de la fama, pero hay algo diferente en ella, y es su propia condición de mujer trans.
Ya hemos podido comprobar que las cosas en Puerto Rico no son precisamente favorables para este tipo de personas, y que el colectivo LGTB+ sigue estando muy censurado en esta parte del mundo. Sin embargo, figuras como la de Villano Antillano han conseguido, poco a poco, dejar atrás esa imagen. Su carrera comenzó con algunas colaboraciones con artistas locales, y su estilo tan propio y especial, unido a su imagen, hacían de ella una auténtica diva. El gran éxito llegó con la colaboración con Bizarrap, que se encajó en el top de países como México, España, Colombia o Argentina. Es, de hecho, una de las sesiones favoritas del propio productor argentino, y una de las más escuchadas dentro de su canal. Con su sesión, Villano Antillano se convertía en la primera artista trans en llegar al top de Spotify.
Una reflexión sobre ser transgénero
Tras su colaboración con Bizarrap en el verano de 2022, Villano Antillano logró tener una enorme repercusión a nivel mundial, empujada también por el éxito de otro tema de Bizarrap, el conocido como “Quédate”, junto al rapero canario Quevedo. La joven puertorriqueña ha podido disfrutar las mieles del éxito, actuando junto a su compatriota boricua Bad Bunny o apareciendo en galas de la MTV, dándose a conocer a nivel mundial. En sus entrevistas, al igual que en sus canciones, Villano Antillano defiende la necesidad de ser libres, de permitir que cada persona sea como quiera ser, sin yugos ni juicios. Ella misma reconoce la dificultad de vivir siendo transgénero, pero aboga por seguir peleando para darles a esas personas la mejor vida posible.